Descripción enviada por el equipo del proyecto. Sobre una base sobresaliente se alza una estructura de hormigón delgada y alargada; con un techo inclinado poco inclinado, el edificio cae precisamente en el terreno con pendiente. Ubicado afuera de la ciudad de Vaduz, en un barrio de uso mixto entre residencial y comercial, el proyecto está diseñado para referirse a elementos de la arquitectura clásica, así como para mantener una forma vernácula.
Estas identidades ambivalentes se simbolizan a través de las complejidades maleables de las columnas formadas por el uso de hormigón encofrado en obra. Este método de construcción es una parte deliberada y esencial de la identidad del edificio, y da la ilusión de ser moldeado en el sitio. El aspecto distinguido de las fachadas de hormigón expuestas permite que aparezcan los vestigios del encofrado.